
Gama Estudio Cerámica
Somos un taller de cerámica llevado por Fer y Sof, donde exploramos y estudiamos los materiales para diseñar piezas distintivas. Nos inspiramos principalmente en las formas orgánicas de la naturaleza. Experimentamos con los elementos de la tierra, respetando los procesos y la magia de sus tiempos para concretar nuestras ideas.
Cada pieza está hecha con dedicación y paciencia. Un rasgo importante para nosotras es la calidad en el trabajo, es por eso que dedicamos tiempo y cuidado a cada etapa del proceso. El paso que más nos gusta es el esmaltado, una fase que requiere de técnica y fórmula para que los óxidos pigmenten según su reacción química.
Nuestro objetivo es conectar al cliente con la naturaleza, hacer que la experiencia cotidiana se vuelva un gozo y recordar la importancia de disfrutar cada momento. Compartimos la filosofía wabi-sabi, haciendo de las imperfecciones detalles naturales que hacen cada pieza única.
SOMOS FER Y SOF
Diseñadoras enfocadas en encontrar sinergia y dinamismo entre el plato y la comida.
Iniciamos Gama Estudio en el año 2017.
Diseñamos piezas ornamentales y utilitarias para uso de hoteles, restaurantes y hogar.
Nos inspiramos principalmente en las formas orgánicas de la naturaleza, creando a partir de una metodología de diseño.
Tenemos gusto por la comida y nos encanta ver como lucen los platillos junto con los acabados naturales que manejamos, recordándonos el origen.
MATERIAL
El material con el que trabajamos es receta de Gama Estudio. Mezclamos arcillas orgánicas y procesadas con minerales como el cuarzo para obtener una pasta de calidad y resistente.
PROCESO
Hechas 100% a mano.
Mezclamos la materia prima y respetamos el tiempo de añejamiento para obtener una pasta de alta calidad.
Iniciamos con una buena amasada de la pasta y la moldeamos a mano con diferentes técnicas de construcción para lograr las formas orgánicas que buscamos.
Cuidamos el secado (que puede llegar a tomar semanas) para que las piezas no se deformen o se cuarteen.
Posteriormente, hacemos la primer quema a 960°C para tener una consistencia firme de las piezas llamada sancocho, las cuales pintamos a mano con óxidos colorantes y fijamos con esmaltes también formulados por nosotras.
Una vez esmaltados los platos, los metemos por segunda vez al horno, ahora a 1260°C por 12 horas aproximadamente.
Damos los acabados finales y hacemos pruebas de calidad para que lleguen reluciente a la mesa, enmarcando los platillos emplatados.
Nuestro objetivo es conectar al usuario con la naturaleza, hacer que la experiencia culinaria se vuelva un gozo, recordar la importancia de disfrutar cada momento y los pequeños detalles.